En esto que estaba yo (y el
escribano de este blog) de vacaciones, cuando a unos seres muy poco humanos les
dio por joder las vidas de cientos de personas en Barcelona y tengo que sacar algo
de mí cuanto antes.
Matadlos, matadlos a todos. A los
malditos moros, a los musulmanes, a todos… sacad los tanques, quemad sus casas,
acabad con esa maldita seudo-cultura sin civilizar, cortadla por lo sano.
Muertos los perros, muerta la rabia. Hace siglos que su única aportación a la
humanidad es maltratar a las mujeres y matar a inocentes.
Cerrad las fronteras, que no
salga ni uno, y mucho menos en dirección a nuestros países. Cerradlas con mil
llaves, que se maten entre ellos hasta que no quede ni uno. Echad a los que ya
están entre nosotros, y a sus hijos, no vayan a buscar venganza y falsa
justicia. Culpables todos, chusma.
Prended fuego a lo que quede. Ni
rastro de su puta religión, no vaya a venir alguien después a recuperarla, que
el fuego purificador acabe con las mezquitas. Que quede todo bien limpito.
Esa es la solución al problema.
Quieren guerra, démosles guerra. Ganemos la guerra, aplastémosles; ya hemos
intentado educarles, ya hemos intentado pacificarles, no aprenderán nunca. Son salvajes
y solo entienden de palos, palos hay que darles.
No habrá siguientes, hay que darles
tanto y tan fuerte que nunca jamás ningún otro bastardo se atreva a alzar su puño
contra nosotros.
¿Os creéis esto? ¿en serio? ¿Creéis
que la solución es así de fácil? Yo no. La verdad es que ni me gustaría que esa
fuera la solución, pero es que ni me lo creo. Igual que creo a veces la mejor
solución para un animal es sacrificarlo (será feo, pero es mi opinión) y no es
nada agradable, no creo que lo sea para el terrorismo islámico.
Ni de puta
coña.
Primero porque no hay manera
alguna de diferenciar entre el “bueno” y el “malo” hasta que es tan evidente
que es el “malo” que cargaría sobre nuestra sociedad la muerte de miles,
millones de inocentes. Ya lo hicimos creando imperios (no solo España, también
Inglaterra, Francia, Alemania y EEUU), y no mola nada.
Segundo porque vendrán nuevas
generaciones con más odio, y lo que es peor, con una parte importante de razón.
Tercero porque sería un
precedente perfecto para repetirlo… nos molestan los ugandeses, matamos a los ugandeses,
nos molestan los rubios, matamos a los rubios. Nótese que ni ugandeses ni rubios
me producen afecto u odio, así en general.
Y ahora me decís. “Que listo eres
siempre, ¿cuál es la solución entonces, eh listo?” pues ni puta idea, ya me
gustaría tenerla y que alguien me hiciera caso, pero no la tengo. Ni la
solución, ni la formación, ni la información para ni tan siquiera acercarme a
la solución. Os diría que la educación, la libertad y el quitarles la razón
inicial si está fuera que explotamos a su pueblo, pero no es así. Para
solucionar un problema hay que entender la raíz del problema, entender porqué
hacen lo que hacen, y no lo entiendo.
No es solo que no comparta, es
que no consigo ver las razones. Me pasa también con cosas como la pedofilia, la
negación a recibir transfusiones de sangre o el pegar a alguien por diversión.
Puedo ver, que no compartir,
razones para abandonar a una familia, para robar, para matar, para odiar o para
morir, pero no veo porqué alguien mata a personas de forma aleatoria.
Sí, soy un tipo raro y me gusta
pensar antes de tomar decisiones, incluso antes de odiar, y antes de hablar o
de criticar. Me encantaría que lo hiciera todo el mundo, pero solo os lo pido a
vosotros que habéis leído esto hasta aquí. Dadle una pensada a las cosas antes
de lanzaros a criticar, antes de odiar, antes de fomentar el odio; a veces os sorprenderéis.
Y os pido perdón, este es un blog de los de "echarse unas risas", no de esto.
P.D.: Por cierto, recordad a los que ayer llamaban "catalanes de mierda" a los ciudadanos de Barcelona, que hoy son los muertos que lloran. Como cambia la vida al cambiarse el cristal con el que se miran las cosas, ¿verdad?
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